La fobia que todos tenemos y no sabemos: la nomofobia.

¿Cuántas veces al día nos despegegamos del móvil?¿qué pasa si nos lo olvidamos en casa? ¿ tienes esa sensación de inseguridad, miedo o necesidad?

Pues a ese miedo irracional a estar desconectado y no disponer del teléfono por cualquier causa. 

La juventud de su día a día utiliza el móvil para el 99% de su actividad diaria: para comunicarse, colgar fotos, buscar información, etc.

Vamos por la calle y vemos a grupos de amigos que estan con el móvil hablando con otras personas eb vez de hablar entre ellos mismo en persona. A este fenómeno lo llamamos "Phubbing", al estar pendiente del móvil cuando esámos con otras personas y, en cierta manera, rebajar a importancia que ésta tiene en nosotros. 

                                                                                 

Vemos como cada vez más los niños pequeños prefieren estar con el móvil jugando a cualquier cosa que jugando al aire libre, con los muñecos y juguetes de toda la vida...

Si empezamos a analizar a cada uno de nosotros, la mayoria, por no decir todos, en cierta forma tenemos aunque mínima, una especie de adicción a los teléfonos móviles y sentimos la necesidad de ir siempre y en todo momento con ello. 

Y diréis... "Tener una pequeña adicción no significa que tengamos nomofobia" y, sí, tenéis toda la razón. En mi caso, a mis 20 años de edad, paso muchisimo tiempo enganchada a las redes sociales que me permiten hablar con mis amigos y familia o, sino, viendo películas, series...pero cuando llega el momento de desligarse del móvil soy la primera que lo agradece y disfruta. No obstante, y lamentablemente,  no es el caso de todo el mundo y cada vez más se encuentran casos de nomofobia.

Para no llegar a este punto los profesores y padres debemos tomar precauciones, limitar el uso de estas tecnologías, sobre todo cuando son pequeños, y asegurarnos de pasar tiempo con ellos sin la necesidad de tener los móviles cerca, que disfruten de la naturaleza, de pasar tiempo con sus amigos; pero de verdad, no pegados a los móviles, tablets u ordenadores... que sepan valorar la suerte de tenerlos siendo conscientes que son recursos para facilitarles la vida pero que, sin ellas, la vida sigue y es igual de bonita.

En cuanto al Phubbing, concepto anteriomente mencionado, nosotros debemos dar ejemplo y ser referencia. Asi pues, debemos ser los primeros en dejar el mócil a la hora de comer, estar pendientes de nuestros hijos en vez de viciados a las tecnologías, no estar las 24 horas de día junto a él, etc. De esta manera no solo estaremos dando ejemplo a nuestros hijos y alumnos sino que también nos estaremos haciendo un favor a nosotros mismos, permitiendonos disfrutar de los pequeños placeres de la vida.